30 de marzo de 2010

[churromode=ON]

Ayer no es que tuve un día de mierda, pero me enojé un poco con el destino, me enojé porque le pasan cosas malas a la gente buena, la gente mala la pasa bárbaro, y yo soy una maricona que no se banca la injusticia (¡¿Y EL KARMA?! ¡¿está trabajando o está de vacaciones?!). Y quería un té, porque un tecito, qué sé yo, me consuela. Soy fan del té. Té helado, té caliente, té de cualquier cosa, dos o tres por día. Así que fui, puse el agua a hervir, puse el saquito (uno de vainilla, para más placer), puse azúcar en la taza, hice el ritual de poner y sacar el saquito hasta teñir el agua bien oscura, lo revolví, y volví a mi pieza. Y cuando tomé el té, qué bronca. Le faltaba azúcar.

LE FALTABA AZÚCAR A MI TÉ, ¿ENTENDÉS?

Me agarró una frustración... no bastaba con volver hasta la cocina y ponerle más azúcar, ahora estaba arruinado, ya me había terminado de cagar la vida. Estoy loca, lo pongo de nick en el MSN. La gente se reía de la frase. Sí, gracioso, pero mi frustración venía de otro lado. Es que no era que me había olvidado, no era que no había encontrado el azúcar, le había puesto, pero faltaba un poco para que mi felicidad fuera completa.

Entonces me cayó la ficha: es que mi vida es como una buena taza de té, con todo lo necesario para que lo sea: servido en una taza grande, a temperatura perfecta, dulce, de rico olorcito. Pero le falta esa PUTA cucharadita de azúcar, un poquito que hace TODA la diferencia.


13 comentarios:

La Criatura dijo...

y eso que hay gente asquerosa que usa edulcorante...

Desencantada dijo...

Ni hablar! No sé como pueden vivir así U_U

Ivy* dijo...

Amo el té, así que te entiendo. Un buen Twinnings de vainilla (sin dudas, mi favorito) sin el toque de azúcar simplemente no es igual. Qué destino de mierda que no te dejó disfrutar tu momento en paz!

Ivy* dijo...

Amo el té, así que te entiendo. Un buen Twinnings de vainilla (sin dudas, mi favorito) sin el toque de azúcar simplemente no es igual. Qué destino de mierda que no te dejó disfrutar tu momento en paz!

Anónimo dijo...

Por como vienen las cosas, creo que puedo afirmar que el té nunca va a estar lo suficientemente dulce....hete aqui la zanahoria....malo o bueno, no sé, pero me pa que no queda otra...
un besito!

Gabriela dijo...

Que buena síntesis!
Pero fijate, que en algunos breves momentos, ese té es perfecto, estate atenta, la felicidad es tan efímera...

Rengo dijo...

La verdad... interesante reflexión... me hiciste pensar que mi vida también es algo así... pero siempre como que nos falta algo, también me hiciste acordar a un tema de La Mississippi que se llama Un poco más.

Igualmente Gabriela tiene mucha razón... la felicidad es efímera demasiado diría yo, pero nunca hay que dejar de perseguirla, siempre tenes que pensar mientras haces tu té (el próximo) que esta vez te va a salir bárbaro... y en una de esas... cuando sale joya inevitablemente el té se termina... y no queda otra que disfrutarlo a pleno... sino se te enfría...je y así sigue todo, siempre es así...
(el Tic no alcanza al Tac)

Un beso, me gustó tu blog

taly g dijo...

se estaba extrañando tus publicaciones! te ausentaste por unos dias che! todos reflejan la vida en algo, nunca escuche ejemplificar tu vida en una taza de te!y la azucar!!! buena palabra para reflejar lo bueno que al parecer te esta faltando (segun vos)!

Nico dijo...

Muy pero muy buena analogía. Te pasaste.

Abrazo grande.

Desencantada dijo...

Ivi:
Lo peor es que el té se puede arreglar, pero lo que el té representaba no!

Penélope:
Puede ser, siempre hay un toque amargo en la vida.

Gabriela:
¿En el mismo té en el que falta el azúcar puedo encontrar momentos felices? Mmm... interesante... tenés razón.

Nico:
Linda forma de pensar, que la próxima va a salir mejor, y obviamente disfrutarlo antes que se enfríe!

Taly:
Ayy que tierna! Siempre me ausento unos días, hasta que doña inspiración me visita de nuevo. O hasta que necesito escupir ideas!

Nico:
Gracias chee! Siempre ahí vos leyendo =)


Besos y saludos a todoss!

Pepe dijo...

Buenas!!!
Jeje!!
Creo que entiendo el asunto del té...
El asunto, desde mi punto de vista es: hay algunas variables y un fin que ansiamos (un té lo más cercano a lo deseado posible (no nos vamos a poner pavos pidiendo cosas perfectas...)). Entonces: ajustemos las variables lo más que se puedan...
Es decir: ¿que hubiera ocurrido si en lugar de frustrarte te hubieras levantado a poner una cucharadita mas? ¿EH?
Quiza la variable es uno... =S
En fin yo tampoco lo hubiera hecho, pero es genial decir bobadas!!!
Besos, un gusto conocerte!!!

Desencantada dijo...

Existe un té perfecto, sabelo! Me ha salido. No en la vida, claro... jajaaj... y justamente, ir a poner una cucharadita más no iba a arreglarlo, porque yo fui confiada en que estaba re bien, entendés? U_U

allyouneedisblood dijo...

Yo quiero poder ir a la cocina a buscar la cucharadita de azucar que le falta al té de mi vida!!! Si fuera por mi iría corriendo... pero como hay cosas que son de a 2 hay que esperar... ¡mejor tomar té sola! no? jaja No, la verdad que sola mejor no.

beso!