Tengo excusas para no hacer las cosas que no quiero hacer, hasta que tengo que hacerlas. Pero también tengo excusas para no hacer las cosas -que pienso que- quiero hacer. "Excusas", así llama mi terapeuta a todas las cosas que en mi mente, suenan completamente lógicas y razonables. Esto no me gusta, esto no me interesa lo suficiente, esto me irrita, esto me da fobia, esto no me parece viable, ahora no es el momento, me cuesta demasiado, no sé por dónde empezar, lleva muchísimo tiempo.
¿Por qué tengo excusas para todo? ¿Por qué?
Porque tengo miedo.
Tengo miedo a absolutamente TODO. Inclusive a... (ay) cumplir mis sueños.
¿Será que tengo miedo de que pierdan la gracia? ¿Porque cuando cumplí algunos de ellos, no fueron lo que esperaba? ¿Será que todas las cosas que me dan miedo, no son más que el miedo a la decepción, al desencanto? Más que el desencanto de lo externo, el desencanto interno. Me refiero a darme cuenta - mejor dicho, comprobar- que esa versión de mí, no existe. Que sigo siendo esta misma alma perdida, este mismo cuerpo nervioso, esta misma mente catastrófica, este mismo ser que no encuentra su lugar ni su misión ni satisfacción en el mundo y no encuentra la motivación ni la determinación para encontrarlos.
¿Y qué me queda después del desencanto?
Buscar alguna otra ilusión, para después bajarla a la realidad, verlacomo es y no como esperaba que fuera, y luchar por encontrar esa fina línea -ese camino del medio- entre el ideal y la realidad, que me permita desear quedarme en lugar de huír.
Esto es agotador.
Wake in a sweat again Another day's been laid to waste In my disgrace Stuck in my head again Feels like I'll never leave this place There's no escape
I'm my own worst enemy
I've given up I'm sick of feeling Is there nothing you can say? Take this all away I'm suffocating Tell me what the fuck is wrong with me?
I don't know what to take Thought I was focused but I'm scared I'm not prepared I hyperventilate Looking for help somehow somewhere And no one cares
I'm my own worst enemy
I've given up I'm sick of feeling Is there nothing you can say? Take this all away I'm suffocating Tell me what the fuck is wrong with me?
God!
Put me out of my misery Put me out of my misery Put me out of my— Put me out of my fucking misery
En el top 3 de decisiones más idiotas de mi vida, seguro está la decisión de mudarme a donde hoy habito. El sueño de vivir sola, de tener mi espacio, mi "hogar", no dejó de ser nunca un sueño.
Se podría decir que odio estar acá al menos hasta las 6 de la tarde cuando se van los obreros, y en todos los otros momentos en los que los ruidos no me dejan ni pensar. Osea, siempre. Los ruidos no paran. Con muchísima suerte, de 1 a 6 de la mañana podes dormir. A las 7 de la mañana la gente empieza a salir con los autos, y el portón automático se cierra con unos golpes tan fuertes, que todavía me hacen pegar un salto. Enseguida, los obreros empiezan con lo suyo. Conviví con martillazos y taladros directamente sobre mi pared, durante OCHO meses. Todavía no sé cómo sigo sin volverme loca del todo y terminar en cana. A veces mi vecina de arriba, amanece a las 6 y pico, y la llamo "Godzi" (por Godzilla, porque cada vez que da un paso, se entera media manzana). Osea que a veces, ni siquiera hasta las 7 se puede dormir. También le gusta correr muebles, dar portazos e invitar gente a todas horas del día y de la noche, invitados de esos que gritan TODO el tiempo, y que gustan tanto como de su anfitriona de correr muebles, dar pasos a lo Godzilla y gritar a lo minita puber idiota. Eso sólo me deja el bache entre las 6 de la tarde cuando termino de trabajar, y las 11, que es cuando más o menos cuando llega Godzi. Pero no. Ahí está cubriendo el viejo de al lado, que pone siempre la misma playlist de canciones horribles como "Ella dijo" de Los Tipitos, "Libre" de Nino Bravo, "Los Dinosaurios van a desaparecer" de Charly García, "Rasguña las piedras" de Sui Generis, una cantidad asquerosa de temas de Las Pelotas, Los Piojos, Serrat y otras cosas sumamente deprimentes. Siempre la misma, en el mismo orden, 6:30 pm clavado. A la vez, los nenes de abajo se encargan de pegar pelotazos y gritar en el patio (que da a mi pieza). De mientras, el portón, la gente entra y sale, los vecinos se ponen a charlar en el patio, sacan a los perros, los perros ladran. Todo eso sólo los días de semana, eh. Los fines de semana está la variante de que quizás tengas suerte de que no vengan los albañiles, pero al de abajo le pinte ponerse a cortar el pasto o algo por el estilo. Y cuando se levanta él, se levantan los demás, le ceban el mate y se ponen a charlar. Y sacan a los perros, y los perros ladran. Los nenes se levantan, juegan a la pelota. El de al lado pone su playlist pedorra, entre las 9:30 y las 10:30. Uno pensaría que a la hora de la siesta, un sábado o domingo, está todo tranquilo, pero no. Esta gente definitivamente NO DUERME.
Sabés por qué me mudé acá? Porque estoy cerca de lo de mi novio. Porque el departamento es más hermoso de lo que me podía imaginar. Porque no quería irme del barrio. Porque donde vivía antes, había una vieja hija de re mil puta maleducada y forra al lado, y aunque sí podía dormir bastante bien, el lugar era de terror. Había un olor a podrido que venía de la cloaca, a veces no se iba durante días enteros. Las paredes revestidas de madera, se caían a pedazos, mi casa estaba llena de tierra y polvo siempre, sin importar cuánto limpiara. Todo se rompía. Había un rincón al que le llamaba el "respawn", porque matabas una cucaracha y los segundos salía otra del mismo lugar. El lugar era simplemente horrible. Las cucarachas no eran los únicos bichos que había, y yo tengo aracnofobia... comprobé que enfrentar los miedos no cura UN CARAJO la fobia. Fue una pesadilla distinta, pero tan pesadilla como ésta. Ingenuo mi yo del pasado que pensó que esta vez, hacía las cosas bien.
No voy a entrar en detalles de mis hogares anteriores... se pueden dar una idea de lo mal que la paso.
Viste esas pesadillas de las que no podes salir? Cuando soñas que te despertás en tu habitación oscura, y sentís algo maligno mirándote, y querés prender la luz, pero no prende? Y de golpe te despertas de nuevo, para darte cuenta de que le das a la tecla y no se prende la luz, NO SE PRENDE LA LUZ!! Y esa cosa sigue ahí y te va a hacer algo. Y te desesperas más y más y más hasta que logras despertarte y prender la puta luz. Ves tu habitación y tenes el corazón que se te sale del pecho, sudor en la frente y esa sensación horrible de que la cosa esa de mierda que no sabes qué es, pero que es mala, está ahí, esperando. Y sin embargo, viste lo que haces? Vas al baño, prendes todas las luces, te convences de que no hay nada ahí, de que ya pasó y tratas de volver a dormir. Tenes miedo de que vuelva a pasar, pero preferís dormir.
Porque la realidad, la realidad es peor. .
Salía del cuarto donde me alojaba para ver qué hacían los demás. Me acuerdo que tenía shorts y no hacía frío ni calor. Estaba poniéndose el sol, haciendo chispas sobre las hojas de los árboles. La gente charlaba relajadamente sentada sobre el pasto a la orilla del río. Habían vagones de trenes parados alrededor nuestro. No era un lugar lujoso, pero se sentía bien. La corriente del río era fuerte, pero extrañamente se dividía en dos direcciones. "El río tiene dos corrientes", me dije. "Es peligroso, a menos que sepas lo que estás haciendo, porque te arrastra". Veo a un amigo meterse, y caminar sobre el agua, que a pesar de todo no era tan profunda, y desaparece. Él sabe lo que hace, él va por su camino. Yo me contento con estar en la orilla, y hablar si quiero hablar, y callarme si quiero callarme. No me meto al río.
Me despierto.
La sensación del sueño se queda conmigo un rato, y al pensarlo, es bastante extraño, pero fue el más agradable que tuve en mucho tiempo. Me llevo el té a la cama, me pongo a leer. Mi gata se acurruca conmigo y empieza a ronronear. Afuera llueve fuerte, y ese es el único sonido que escucho. Es el mejor momento que tengo en mucho tiempo. Ese sueño y este momento, son el pico de felicidad en toda mi semana.
Darme cuenta de eso me hace romper en llanto.
No recuerdo qué es divertirme. Son tan pocos los momentos que quedan, y se están acortando tanto...
Dejo el libro, me levanto a limpiar. Está todo sucio y desordenado. Mi gata, antes reconfortante, se convierte en una terrible carga que a veces me arrepiento de haber asumido. No para de maullar aunque le di comida, mimos, le abrí la puerta, intenté jugarle... hago todo lo que quiere y nunca es suficiente. Alejé a todo el mundo, pero ella vive conmigo, con ella no puedo. Me hostiga. No me deja estar en el único lugar que -por un tiempo-, es mío.
No quiero ver a nadie.
Quiero estar sola, más sola.
Lejos.
Necesito irme.
Me visto. No me gusta mi ropa, no me gusta mi pelo, no puedo arreglar mi cara ni con todo ese maquillaje.
No importa cuánto lo intente, siempre me siento un payaso triste.
Me resigno.
La lluvia paró. Trazo un plan para hacer aunque sea una cosa de todas las que tengo que hacer, aunque lo único que quería era caminar sin rumbo.
Me voy.
Voy a buscar las entradas para el recital. Las saco del sobre para ver si siento algo al verlas, algún vestigio de esa emoción tremenda que sentía antes, que me llenaba los ojos de lágrimas de sólo pensar lo que significaba tenerlas en mis manos.
Nada.
Busco algo, pero no hay nada emocionante.
Esta ciudad fue siempre igual.
Doy vueltas y vueltas pero ya conozco todas las calles.
Hace muy poco tiempo que me alcanza para comprarme algo de ropa -más por necesidad que por gusto-. Pero eso tampoco me entusiasma.
Camino hasta que no me dan más los pies, pero no quiero volver.
Vuelvo.
No soporto más la gente ni el ruido. El colectivo tarda una eternidad en venir, y la gente me mira como si tuviera la cara desfigurada. Espero no cruzarme ni al vecino.
Me duele todo el cuerpo, espero que haya sido suficiente para mandar a la angustia a dormir.
No tengo más que una sopa para cenar, pero prefiero eso antes que ir a comprar o cocinar.
Llego a casa.
Aprovecho que sigo vestida para sacar la basura de hace dos días, quizás ahora me encierre dos días más.
Suspiro aliviada al cerrar la puerta. No me crucé a nadie. No tuve que fingir una sonrisa más.
Sos la única persona a la que decidí
presentarme sin antes pasar horas arreglándome el pelo o cada defecto de la cara para gustarte. Sos el único
hombre con el cual pude sentirme cómoda a los treinta segundos de verte y el
único con el que pude ser yo misma desde el primer día. Nunca conocí a nadie
tan transparente, frontal y sobre todo, seguro de lo que sentía, de lo que
quería a pesar de ser consciente de lo vulnerable que eso lo hacía. Llegaste
cuando yo aprendí a tener una pizca de eso que tenés vos. De las cosas como
son. De si te gusta bien, y si no, no. Cuando reaprendí el valor de la
honestidad, de arriesgarse, y de no perder tiempo en lo que no lo merece.
Nunca me imaginé que podías entenderme por lo
diferentes que somos, y sin embargo, nunca tuve que darte explicaciones, porque
te calentas en CONOCERME, desde la punta del pelo hasta esa oscuridad profunda
en la que suelo habitar… y "a las personas las aceptas como son, o no las
aceptas", como decís vos. Y cargas con todo lo que soy y todo lo que hago,
y perdonas todo aquello que me falta. Me das todo lo que tenes y me empujas y
me acompañas para ser y estar mejor. Nunca supe que fuera posible que alguien me
quisiera así.
Desde que te conocí ya no escribo tanto... y
es que es la primera vez que alguien me dejó sin palabras.
No sé si todos se aman, o yo me odio demasiado.
Pienso que cambié tanto que igual no podría ni querría volver a "ponerme en vidriera" a ver si alguien quiere comprar. La soledad es difícil, pero no me haría perder nunca tanta dignidad como buscar la aprobación de otros a través de mi cuerpo posado, maquillado, modificado.
El mundo está enfermo pero de alguna manera se las ingenia para hacerme creer que yo estoy peor. De todas formas, sigo prefiriendo desaparecer para aquellos que no quieren verme.
Estoy bastante segura de que no es a propósito lo que hago; en algún momento empiezo a sufrir una metamorfosis irrefrenable. De repente los caminos se separan, y aunque trate de volver, la corriente me lleva a otra parte. Cuando nos junta, en ciertas formas, todo sigue siendo como era, pero no lo es. Un día, las cosas que me divertían, ya no me divierten tanto. Primero se va uno, después otro, y después otro. Y yo me despierto distinta, ya no puedo ser lo que era o comportarme de la misma manera. Supongo que decepciono, si es que llego a importar tanto como para decepcionar. Y no soy más que otra pieza de dominó que cae, otro fantasma en la memoria que se termina borrando como desaparecen las huellas de la arena.
No creo haber tenido un impacto verdadero en nadie, aunque todos tuvieron un impacto enorme en mi. Si fuera así, se hubieran quedado a pesar de todo, ¿no? Hubieran insistido. Pero esa no es una lógica que pueda aplicar en mí, entonces ¿por qué en ellos sí?
A veces -casi siempre- me siento tan afuera de todo que es como si mirara a través de una ventana que nunca puedo cruzar, como si fuera invisible y solamente estuviera soñando momentos en los que llego a tener una conexión real.
Siento nostalgia por cada buena amistad que tuve, dolor por cada traición, impotencia por cada relación que congelé en el tiempo y no logro sacar de su letargo. Una soledad insuperable, y la vergüenza de no lograr lo que todos tan fácilmente tienen, desde la infancia y para toda la vida; porque sé que siempre fue así y siempre lo será, es mi condena. Por mi locura, mi necesidad de desconectarme de todos, y a la vez, el anhelo de conectarme con otros de una manera que parece no existir en mi realidad.
Supongo que mis ganas de morir también tienen que ver con el hecho de que todo el mundo termina haciéndome sentir que ya estoy muerta. Quizás me muero continuamente para ver si alguien nota mi ausencia, y así sé que sí estoy viva. Pero eso no pasa, porque ellos viven en mi, pero yo -hace tiempo- no vivo en ellos.
But does anyone notice? but does anyone care? And if I had the guts to put this to your head... But does anything matter if you're already dead? And there's no room in this hell There's no room in the next
Se supone que aprendas a ser perfeccionista en lo que haces?
O se supone que practicas tanto que aprendes a manejar tus imperfecciones de la mejor manera posible?
Nick Andopolis : "Look, these Teachers, these teachers want us to work! You know. And i say fine. I'll work. But you got to let me do the kind of work that i want to do. And for me Lindsay, it's ... it's my drumkit man. This is my passion you know. This is the essence of who i am now. But before i had this, i was lost too. You see what i'm saying. You need to find your reason for living. You need to find your own gigantic drumkit you know" Lindsay Weir : "Hey maybe i'll buy a Clarinet"
I'm no good with maps I've got no sense of direction And I can't write anything without autocorrection I just can't keep up with this curriculum I wish I could learn in my sleep I've got a problem with problems I'm not punctual I get lost in context and sentence construction I've never said this to anyone before I've never said it out loud
¿No te sentís como un ser con un cuerpo asqueroso, defectuoso? ¿No te sentís la persona más fea, aburrida, estúpida, triste y desagradecida del mundo? ¿No te sentís la más sola, inclusive en los momentos en que estás rodeada de gente? ¿No te sentís un ser de otra dimensión, tratando de penetrar una barrera invisible que te separa de todas las personas, las que querés, las que no querés, las que querés conocer? ¿No sentís miedo, aparte, de penetrar esa barrera invisible, que se caiga para siempre y quedes a la deriva, atrapada en otra realidad? ¿No sentís que ya rompiste la barrera, cayó y la volviste a construír porque la experiencia no fue del todo placentera? ¿No sentís que te querés alejar de todos, irte lo más lejos posible, y a la vez, te sentís solo, incomprendido y sin salida? ¿No sentís que cuando querés escapar, no podes, y cuando querés estar, tampoco podes? ¿No es dormir tu mejor momento del día, el 99% de los días? ¿Crees que nunca vas a conocer esa vida que soñas? ¿Crees que es mejor ni siquiera intentarlo, porque quizás, para algunas personas como yo, la película termina igual que empezó? ¿No te agotan todas esas voces, todos esos ruidos? ¿No queres desaparecer y dejar de mirar este canal? ¿No te parece que la gente cree que vos nunca cambias, y que a veces tienen razón, pero que cuando no la tienen, ya no se enteran nunca porque los alejaste demasiado?
¿No crees que perdiste relaciones valiosas y le diste demasiado tiempo a las que no valían una mierda? ¿No crees que ya es muy tarde? ¿No crees que si perdes lo que al fin lograste, se puede escurrir de las manos? ¿No crees que la felicidad es demasiado frágil para saber experimentarla?
¿No crees que es deprimente que solamente cuando fumas, podes escribir algo? ¿No te parece que se están chupando tu alma tan de a poco que ya te parece normal no estar escribiendo, cantando, tocando, pintando?
¿No te parece que tenes que aceptar tu soledad?
¿No te parece que deberías dejar de avergonzarte por no ser como el resto?
¿No te parece que tenes que aceptar que no hay nadie, NADIE, que te comprenda por completo?
¿No sentís que a nadie le importa?
Pensé en contar en qué evolucionó o no evolucionó esta persona que está acá. Pensé en que debería hacerlo en video, y aprovechar mis 10.000 seguidores en YouTube, gente que aunque sea está un mínimo metida en lo mismo que yo: Espiritualidad, conspiraciones, extraterrestres, paranormal, significado de todas las cosas, saber para qué mierda estoy acá y qué carajo tengo que hacer, y si la felicidad real existe, y si soy una enferma mental o veo todo demasiado claro.
No lo hice porque me voy a frustrar; ya lo intenté, no me gusta la exposición. Pero a la vez, si quiero conectar con alguien que no me haga sentir infinitamente sola en este planeta, tengo que exponerme de alguna manera, tengo que correr algún riesgo. Y bueno, ésta es mi manera favorita de exponerme. Aunque sea un llamado anónimo y eterno que queda ahí flotando en el aire por si alguien puede escucharlo, como un llamado al espacio exterior, un mensaje que se retransmite como disco rayado por una antena de bajísimo alcance con el único fin de tener la posibilidad de llegar a un ser vivo, uno realmente vivo, en alguna dimensión desconocida, y finalmente hacer contacto. No tener contactos, HACER PUTO CONTACTO.
Y creo que explicar detalles, circunstancias, situaciones, pasados, miedos y sueños que me llevaron a ser quien soy hoy, no es relevante. Todo eso es superficial. Soy éste ser solitario, buscando el camino a casa, o alguien de mi especie (¿soy de una "especie"?). Mi casa real, mi lugar, la sabiduría, mi gente, si es que existe esa gente. Moriría por volver a la casa a la que todos terminamos volviendo después de viajar en este vehículo. Extraño gente que no conozco, y extraño un lugar que no sé qué aspecto tiene, pero lo siento, cuando veo un bosque, cuando escucho una guitarra, cuando veo los ojos de un animal. No siento que desee cosas que nunca tuve, sino que las extraño con una sensación desgarradora y amnésica.
Soy demasiado antigua y estoy demasiado cansada de absorber todo la maldad de este mundo; estoy drenada. Todas las salidas conducen a otra trampa, y cuando las supero, es una menos, pero el laberinto es infinito, una broma cruel tras otra, tras otra, tras otra. La felicidad no existe, la conformidad es mediocre, porque yo no soy ésto, y no puedo conformarme con ser lo que no soy.
Y quiero salir, y correr. Lejos. Quiero volar lejos. Quiero irme lo más lejos que pueda de esta existencia.
El problema es que creo que todo puede ser una gran mentira, excepto la existencia.
Entonces no me queda otra que existir.
Y acá estamos. Existiendo, aunque nadie reconozca nuestra existencia.
Planet Earth is blue and there's nothing I can do.