"Me gustas tal cual sos".
Mr. Darcy le dijo eso a Bridget Jones, ante su expresión de incredulidad.
Es que es así.
"Me gustas tal cual sos". Uno jamás piensa en cambiar absolutamente nada de la persona que le gusta... porque está bien, porque sus defectos también te parecen encantadores.
Es una paradoja, que ese "tal cual sos" casi nunca llega a ser visto por quien queremos que lo vea. Amigos, familia, inclusive extraños tienen acceso a tu verdadero yo, porque la verdad, es que te importa tres pitos lo que piensen de vos. Nunca haces algo por agradarle a un amigo, nunca te preocupas si un extraño no te quiere...
Pero esa persona que te está volviendo loca, justo esa, no, no podes mostrarle tu verdadero yo. Porque tu cabeza está entre los dos. Tu cabeza, pensando, maquinando, tratando de darle órdenes coherentes a tu cerebro para que tu cuerpo reaccione adecuadamente, calculadamente... como si pudieras saber qué quiere el otro, como si pudieras ser quien sos y quien él quiere que seas a la vez.
Entonces quizás un amigo o un completo extraño puede llegar a verte... y quererte así, como Darcy a Bridget. Y esa persona que hace que te bloquees, que no puede ver ni un 50 % de tu "tal cual sos", no puede enamorarse de vos. Ni de tu careta, porque lo superficial no llega al corazón.
¿No es irónico?
28 de noviembre de 2010
13 de noviembre de 2010
Recuerdos del futuro
Querida Yo del pasado:
Te escribo esta carta para brindarte paz, sabiduría y fortaleza. Quiero que sepas con absoluta seguridad -ya que yo no tuve la suerte de que me escribiera ningún Yo futuro- que todo va a estar bien.
Quisiera empezar por lo que crees que es tu propósito en la vida. De niña siempre creíste que ser alguien importante y respetado que cambiara las vidas de los demás era la misión de todas las personas que llegaron a este mundo, lo lograran o no. Pero es necesario que sepas que si bien podes hacer la diferencia para muchos, no viniste a salvar a nadie, ni a ganarte el respeto de tus pares, ni a cerrarles el pico a los que piensan mal de vos. No necesitas de nada ni nadie, porque sos una persona importante, digna y capaz de cualquier cosa desde el momento en que naciste... no sé por qué con el paso de los años lo olvidaste, pero aquí estoy para recordártelo.
A medida que crezcas descubrirás que en cada persona hay otras dos: la que verdaderamente es, y la que vos crees que es. Aunque al principio será difícil saber percibir cuál es la real, el tiempo lo dirá. Verás que aquellas personas que creías felices, son las más miserables. Aquellas que parecían tan especiales, no lo eran. Aquellas que parecían tan insignificantes, te pueden salvar la vida. Todo depende de la perspectiva que elijas. No te preocupes; tu vida no tiene por qué ser como las suyas. Cada cual hace lo que hace y está bien. No busques vengarte de aquellos que te hirieron; la vida les está enseñando a todos las mismas lecciones a través de diferentes experiencias.
Por eso, toma a las personas como compañeras de un viaje, pero no dejes que te influencien ni te repriman en tu camino. Solo escuchate a vos misma.
La relación más importante que tengas en tu vida, (descubrirás con el tiempo)… es con vos misma. Lo demás son sólo ingredientes que llegan para ayudarte a preparar el mejor pastel posible que puedas imaginarte. Cada hombre que hayas amado te dejará una enseñanza, una nueva forma de ver la vida. Cada hombre será el principio y el final de un capítulo, todos ellos son una puerta hacia el siguiente; no te detengas en el umbral, siempre hay algo más al cruzarlo. Y como todo buen libro que está compuesto de muchos capítulos, algunos hermosos, otros no tan lindos, y otros espantosos, llegará el final. Cuando llegue el hombre indicado simplemente lo sabrás. Él será la culminación de todo lo que creaste, amando y odiando, deseando y llorando. No te preocupes, el universo entero está conspirando para que se encuentren. No se te va a escapar, y él no se va a enamorar de otra. Él es tuyo y vos sos suya. No lo dudes ni por un segundo, él llegará solo, ni bien te animes a soltar los deditos de ese último umbral y des un pequeño paso adelante. Si no me crees, deberías verlo mientras duerme serenamente en nuestra cama en este momento. Es como un ángel.
Finalmente, quiero que sepas que aunque todo parece difícil en este momento, las cosas funcionaron de maravilla para vos. Te convertiste en quien querías ser. Tu cuerpo, tu alma, tu vida es todo lo que deseabas. Vivo en esta hermosa mansión casi por arte de magia, aunque sé que te lo debo a vos, por pasar tanto tiempo soñándolo, moldeándolo. Tengo un esposo millones de veces mejor de lo que había imaginado. Nos gusta viajar por el mundo constantemente conociendo nuevas culturas, disfrutando de hermosas playas, recorriendo ciudades antiguas. Nos casamos en París. No era una ciudad tan romántica como la pintaban, había muchas ratas, pero nos encantó de todas formas. Él es un excelente amante, un tipo sincero y el mejor amigo que pudiera tener jamás. Está completamente loco, igual que vos, y nos reímos tanto que lloramos. Nunca somos capaces de divertirnos tanto como cuando estamos juntos. Nos divertimos en cualquier lado, en cualquier circunstancia. Es emocionante estar a su lado… no queremos separarnos nunca. Me siento excelente, entusiasmada y apasionada por la vida… amo mi trabajo. Jamás pensé que podía conseguir trabajar de algo que amara tanto, pero lo conseguí. ¿Sabías que hay miles de trabajos de los que nadie tiene idea? Y no hay otra forma de encontrar tu trabajo ideal que persiguiendo las cosas que te gustan, ciegamente. Debería ser algo que haces sin esfuerzo, con ganas, con entusiasmo... y si no lo sentís, siempre podes cambiar de rumbo. Siempre.
Me es difícil recordar qué se sentía ser vos… vos de 7 años, vos de 15 años, vos de 18 años, vos de 24 años… pero si pudieras comprender y nunca olvidar estas cosas que estoy a punto de decirte, sé que jamás volverías a llorar…
Sos hermosa y perfecta, por dentro y por fuera.
Hay alguien diseñado especialmente para vos, al igual que vos estás diseñada para él.
Van a encontrarse en el momento adecuado...
El dolor siempre es pasajero, disfrutalo, es bello... el dolor causa inspiración, el dolor te ayuda a moverte hacia lo que deseas.
Vas a ser muy feliz.
Nunca es tarde para empezar nada.
Nada es tan importante como parece.
Jamás prestes atención a lo que dicen o piensan los demás.
Podes ser y tener todo lo que desees.
Lo único que necesitas para lograr todos tus deseos es confiar en mi…
yo YA los cumplí.
Te escribo esta carta para brindarte paz, sabiduría y fortaleza. Quiero que sepas con absoluta seguridad -ya que yo no tuve la suerte de que me escribiera ningún Yo futuro- que todo va a estar bien.
Quisiera empezar por lo que crees que es tu propósito en la vida. De niña siempre creíste que ser alguien importante y respetado que cambiara las vidas de los demás era la misión de todas las personas que llegaron a este mundo, lo lograran o no. Pero es necesario que sepas que si bien podes hacer la diferencia para muchos, no viniste a salvar a nadie, ni a ganarte el respeto de tus pares, ni a cerrarles el pico a los que piensan mal de vos. No necesitas de nada ni nadie, porque sos una persona importante, digna y capaz de cualquier cosa desde el momento en que naciste... no sé por qué con el paso de los años lo olvidaste, pero aquí estoy para recordártelo.
A medida que crezcas descubrirás que en cada persona hay otras dos: la que verdaderamente es, y la que vos crees que es. Aunque al principio será difícil saber percibir cuál es la real, el tiempo lo dirá. Verás que aquellas personas que creías felices, son las más miserables. Aquellas que parecían tan especiales, no lo eran. Aquellas que parecían tan insignificantes, te pueden salvar la vida. Todo depende de la perspectiva que elijas. No te preocupes; tu vida no tiene por qué ser como las suyas. Cada cual hace lo que hace y está bien. No busques vengarte de aquellos que te hirieron; la vida les está enseñando a todos las mismas lecciones a través de diferentes experiencias.
Por eso, toma a las personas como compañeras de un viaje, pero no dejes que te influencien ni te repriman en tu camino. Solo escuchate a vos misma.
La relación más importante que tengas en tu vida, (descubrirás con el tiempo)… es con vos misma. Lo demás son sólo ingredientes que llegan para ayudarte a preparar el mejor pastel posible que puedas imaginarte. Cada hombre que hayas amado te dejará una enseñanza, una nueva forma de ver la vida. Cada hombre será el principio y el final de un capítulo, todos ellos son una puerta hacia el siguiente; no te detengas en el umbral, siempre hay algo más al cruzarlo. Y como todo buen libro que está compuesto de muchos capítulos, algunos hermosos, otros no tan lindos, y otros espantosos, llegará el final. Cuando llegue el hombre indicado simplemente lo sabrás. Él será la culminación de todo lo que creaste, amando y odiando, deseando y llorando. No te preocupes, el universo entero está conspirando para que se encuentren. No se te va a escapar, y él no se va a enamorar de otra. Él es tuyo y vos sos suya. No lo dudes ni por un segundo, él llegará solo, ni bien te animes a soltar los deditos de ese último umbral y des un pequeño paso adelante. Si no me crees, deberías verlo mientras duerme serenamente en nuestra cama en este momento. Es como un ángel.
Finalmente, quiero que sepas que aunque todo parece difícil en este momento, las cosas funcionaron de maravilla para vos. Te convertiste en quien querías ser. Tu cuerpo, tu alma, tu vida es todo lo que deseabas. Vivo en esta hermosa mansión casi por arte de magia, aunque sé que te lo debo a vos, por pasar tanto tiempo soñándolo, moldeándolo. Tengo un esposo millones de veces mejor de lo que había imaginado. Nos gusta viajar por el mundo constantemente conociendo nuevas culturas, disfrutando de hermosas playas, recorriendo ciudades antiguas. Nos casamos en París. No era una ciudad tan romántica como la pintaban, había muchas ratas, pero nos encantó de todas formas. Él es un excelente amante, un tipo sincero y el mejor amigo que pudiera tener jamás. Está completamente loco, igual que vos, y nos reímos tanto que lloramos. Nunca somos capaces de divertirnos tanto como cuando estamos juntos. Nos divertimos en cualquier lado, en cualquier circunstancia. Es emocionante estar a su lado… no queremos separarnos nunca. Me siento excelente, entusiasmada y apasionada por la vida… amo mi trabajo. Jamás pensé que podía conseguir trabajar de algo que amara tanto, pero lo conseguí. ¿Sabías que hay miles de trabajos de los que nadie tiene idea? Y no hay otra forma de encontrar tu trabajo ideal que persiguiendo las cosas que te gustan, ciegamente. Debería ser algo que haces sin esfuerzo, con ganas, con entusiasmo... y si no lo sentís, siempre podes cambiar de rumbo. Siempre.
Me es difícil recordar qué se sentía ser vos… vos de 7 años, vos de 15 años, vos de 18 años, vos de 24 años… pero si pudieras comprender y nunca olvidar estas cosas que estoy a punto de decirte, sé que jamás volverías a llorar…
Sos hermosa y perfecta, por dentro y por fuera.
Hay alguien diseñado especialmente para vos, al igual que vos estás diseñada para él.
Van a encontrarse en el momento adecuado...
El dolor siempre es pasajero, disfrutalo, es bello... el dolor causa inspiración, el dolor te ayuda a moverte hacia lo que deseas.
Vas a ser muy feliz.
Nunca es tarde para empezar nada.
Nada es tan importante como parece.
Jamás prestes atención a lo que dicen o piensan los demás.
Podes ser y tener todo lo que desees.
Lo único que necesitas para lograr todos tus deseos es confiar en mi…
yo YA los cumplí.
8 de noviembre de 2010
Las dos caras
[Edit: 1- está redactado como el orto. 2-estoy con cero ganas de corregirlo. 3-lo escribo más para mi que para ustedes (porque me olvido de las cosas después) 4- si no les gusta me chupa. 5-gracias y saludos a todos los que me conocen. (?) 6- si se quieren reír, pasen por mi blog nuevo, en una de esas se ríen. Y si no, son unos amargos. Chau.]
Cuando llueve, el flaco prefiere ni salir de la cama...
Pero muchos otros se levantan, se hacen un cafecito y esperan a que pare. Siempre para.
Ella sale de la oficina dando saltitos por la vereda, esquivando los charcos con cara de asquito...
Pero su compañero camina mirando hacia delante porque sabe que va a mojarse igual... y que después puede bañarse.
Él lleva un paraguas a 45 grados, luchando contra la lluvia que cae de costado...
Pero aquella está resignada a mojarse, porque aprendió que el viento es más fuerte que el paraguas.
Una apurada corre para encontrar un taxi que no encuentra...
Pero por al lado pasa un flaco que se pone la capucha y va escuchando música como si nada.
Una madre va a buscar a sus hijos al colegio, y los hace correr hasta el auto...
Pero su hija camina tranquilamente disfrutando del paisaje mojado, sabiendo que no falta demasiado para llegar a casa para secarse.
Qué curioso es que nunca queramos mojarnos en un planeta en donde llueve cada dos por tres. En un mundo en donde aunque estés al resguardo de tu propia casa, puede haber una gotera. O varias. O hasta se te puede caer el techo.
Y aunque te apures, corras, hagas la parabólica para que el paraguas no se te doble con el viento, saltes los charcos a lo Mary Poppins, te compres el ultra-paraguas 3.0, te gastes la guita del almuerzo en el taxi, te quedes debajo de un techito aprendiéndote una vidriera de memoria, hagas tiempo en un café deprimente oliendo perfume barato de vieja… sabes que, con o sin tormenta, vas a tener que seguir, como sea.
Cuando hay tormenta, ¿pensas que te va a caer un rayo encima, porque tenés una suerte de mierda? ¿O estás seguro de que el rayo tiene algo más importante que destruír que un pobre diablo como vos? Siempre hay más opciones de las que ves... solamente tenés que permitirte verlas. ¿Quién querés ser? ¿El que disfruta únicamente del cielo despejado, o el que sabe que aunque esté nublado ahora, el sol siempre estuvo (y va a estar) ahí?
No importa cuánto tardes o de qué forma lo hagas, qué es lo correcto o lo equivocado; lo importante es tomar una decisión, y retomar el camino.
La vida una y otra vez presenta las mismas situaciones. No podemos hacer que pare de llover, pero sí podemos elegir: continuar el viaje ya emprendido, o cambiar de rumbo. Eso sí: no te quedes bajo la lluvia esperando que algo cambie, porque aunque salga el sol, nunca va a faltar una nube conchuda y oportuna que te venga a empapar cuando menos te lo esperes.
Cuando llueve, el flaco prefiere ni salir de la cama...
Pero muchos otros se levantan, se hacen un cafecito y esperan a que pare. Siempre para.
Ella sale de la oficina dando saltitos por la vereda, esquivando los charcos con cara de asquito...
Pero su compañero camina mirando hacia delante porque sabe que va a mojarse igual... y que después puede bañarse.
Él lleva un paraguas a 45 grados, luchando contra la lluvia que cae de costado...
Pero aquella está resignada a mojarse, porque aprendió que el viento es más fuerte que el paraguas.
Una apurada corre para encontrar un taxi que no encuentra...
Pero por al lado pasa un flaco que se pone la capucha y va escuchando música como si nada.
Una madre va a buscar a sus hijos al colegio, y los hace correr hasta el auto...
Pero su hija camina tranquilamente disfrutando del paisaje mojado, sabiendo que no falta demasiado para llegar a casa para secarse.
Qué curioso es que nunca queramos mojarnos en un planeta en donde llueve cada dos por tres. En un mundo en donde aunque estés al resguardo de tu propia casa, puede haber una gotera. O varias. O hasta se te puede caer el techo.
Y aunque te apures, corras, hagas la parabólica para que el paraguas no se te doble con el viento, saltes los charcos a lo Mary Poppins, te compres el ultra-paraguas 3.0, te gastes la guita del almuerzo en el taxi, te quedes debajo de un techito aprendiéndote una vidriera de memoria, hagas tiempo en un café deprimente oliendo perfume barato de vieja… sabes que, con o sin tormenta, vas a tener que seguir, como sea.
Cuando hay tormenta, ¿pensas que te va a caer un rayo encima, porque tenés una suerte de mierda? ¿O estás seguro de que el rayo tiene algo más importante que destruír que un pobre diablo como vos? Siempre hay más opciones de las que ves... solamente tenés que permitirte verlas. ¿Quién querés ser? ¿El que disfruta únicamente del cielo despejado, o el que sabe que aunque esté nublado ahora, el sol siempre estuvo (y va a estar) ahí?
No importa cuánto tardes o de qué forma lo hagas, qué es lo correcto o lo equivocado; lo importante es tomar una decisión, y retomar el camino.
La vida una y otra vez presenta las mismas situaciones. No podemos hacer que pare de llover, pero sí podemos elegir: continuar el viaje ya emprendido, o cambiar de rumbo. Eso sí: no te quedes bajo la lluvia esperando que algo cambie, porque aunque salga el sol, nunca va a faltar una nube conchuda y oportuna que te venga a empapar cuando menos te lo esperes.
1 de noviembre de 2010
No lo digas con palabras
Antes, hace no muchos años, en este mismo pueblo y en el tuyo también, amiguito, cuando querías comunicarte con alguien, ibas a la casa a tocarle timbre, o tal vez podías ir a lo de una vecina o a un teléfono público para llamarlo. No pasó demasiado tiempo desde que hubo un salto en la tecnología y ahora podemos comunicarnos de veinte mil formas distintas. Cuántas veces ahora, pebete, le dejas un mensaje en el caralibro a tu amigo preguntando qué hacen este finde, con la intención -claro- de que su hermana (queestarebuena) lo lea y se prenda en la salida?
Ahora hablamos un montón, hablamos más que nunca, pero... ¿nos entendemos realmente?
En estos tiempos de mi infancia y adolescencia, no existían excusas del tipo "no tenía crédito", "estaba ocupado y por eso no te contesté", o por el contrario cosas como "estoy aburrido, contame algo", "che de qué canción es tu nick?" etc etc. Tampoco (ni siquiera en la era Fotolog) uno le posteaba algo a otra persona pensando en un tercero que puede -o no- llegar a leerla. No había forma de enterarse - a menos que alguien te contara-a qué lugares iba a ir tu amor platónico elchicomaslindodelcolegio los fines de semana para cruzártelo "de casualidad".
Así mismo, la gente era mucho más directa... Vos sabías que fulanito estaba muerto con vos porque los demás te lo decían, porque lo veías sonrojarse cuando pasabas, porque se quedaba colgado mirándote en clase... no te lo dudabas por la cantidad de mensajitos de texto que te mandó o cuántas veces hizo comentarios en tus fotos perras de Facebook. En la época de mi secundaria, se hablaba de "encarar". ¿Existirá eso todavía? Los chicos ya histeriqueaban -no se crean que esto no se venía gestando desde un par de generaciones anteriores-, pero llegado el momento, se armaban de coraje y sin decir nada, te rompían la boca en algún lado. Las casualidades no eran casualidades, al igual que no lo son ahora, pero todos éramos conscientes de eso.
Creo que en el medio de este cambio que sufrieron nuestras vidas (y digo sufrieron, porque me resulta bastante obvio que nos está perjudicando), nos olvidamos que un simple gesto puede decir más que mil palabras. Que de hecho, la mitad de las veces las palabras que decimos son solamente palabras, para charlar, para reírnos, una excusa. Las intenciones que van detrás de las palabras son igual de visibles, pero...
Digo, con tanta era digital, ¿no nos estaremos quedando ciegos a cosas obvias? ¿no estaremos perdiendo la capacidad que antes teníamos de interpretar un lenguaje universal? ¿no estaremos olvidándonos de leer lo que realmente importa? ¡¿NO ESTAREMOS PERDIENDO LOS HUEVOS, TODOS?!
Ahora hablamos un montón, hablamos más que nunca, pero... ¿nos entendemos realmente?
En estos tiempos de mi infancia y adolescencia, no existían excusas del tipo "no tenía crédito", "estaba ocupado y por eso no te contesté", o por el contrario cosas como "estoy aburrido, contame algo", "che de qué canción es tu nick?" etc etc. Tampoco (ni siquiera en la era Fotolog) uno le posteaba algo a otra persona pensando en un tercero que puede -o no- llegar a leerla. No había forma de enterarse - a menos que alguien te contara-a qué lugares iba a ir tu amor platónico elchicomaslindodelcolegio los fines de semana para cruzártelo "de casualidad".
Así mismo, la gente era mucho más directa... Vos sabías que fulanito estaba muerto con vos porque los demás te lo decían, porque lo veías sonrojarse cuando pasabas, porque se quedaba colgado mirándote en clase... no te lo dudabas por la cantidad de mensajitos de texto que te mandó o cuántas veces hizo comentarios en tus fotos perras de Facebook. En la época de mi secundaria, se hablaba de "encarar". ¿Existirá eso todavía? Los chicos ya histeriqueaban -no se crean que esto no se venía gestando desde un par de generaciones anteriores-, pero llegado el momento, se armaban de coraje y sin decir nada, te rompían la boca en algún lado. Las casualidades no eran casualidades, al igual que no lo son ahora, pero todos éramos conscientes de eso.
Creo que en el medio de este cambio que sufrieron nuestras vidas (y digo sufrieron, porque me resulta bastante obvio que nos está perjudicando), nos olvidamos que un simple gesto puede decir más que mil palabras. Que de hecho, la mitad de las veces las palabras que decimos son solamente palabras, para charlar, para reírnos, una excusa. Las intenciones que van detrás de las palabras son igual de visibles, pero...
Digo, con tanta era digital, ¿no nos estaremos quedando ciegos a cosas obvias? ¿no estaremos perdiendo la capacidad que antes teníamos de interpretar un lenguaje universal? ¿no estaremos olvidándonos de leer lo que realmente importa? ¡¿NO ESTAREMOS PERDIENDO LOS HUEVOS, TODOS?!
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